martes, 17 de abril de 2012

La chica del trolley

A la jueza Alaya de los casos de los ERES de la Junta de Andalucía.



No lo puedo evitar: Cuando te veo me emociono.

Con tu paso firme, inflexible y además elegante. Tu actitud: serena y ecuánime. La viva figura de la ley: sin mirar a los lados, ciega ante las interferencias políticas.

Tu paseo entre una nube de periodistas y policías, a la entrada en tu juzgado, bien podría ser la de una actriz sobre alfombra roja. Tirando de tu trolley, como estudiante de vuelta a casa el fin de semana.

!Como te admiro¡ Rehusando protagonismo. Diciendo sin palabras: yo vengo a hacer mi trabajo: encerrar al malo; descubrir al corrupto No quiero famoséo ni que me critiquen o aplaudan según lleve puesto. Soy mujer, si. Y es posible que hasta coqueta,  pero mi trabajo es ciego como la justicia. Solo quiero que quien lo haga lo pague.



JUAN ROMERO CRUZ



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